Hace mucho tiempo en Europa, alrededor de unos 2235 años, coincidieron dos grandes potencias que estaban siempre en constantes luchas por el territorio. Una de ellas estaba en constante expansión territorial y le aguardaba un gran futuro y la otra estaba resurgiendo como una potencia peligrosa para sus intereses. Me estoy refiriendo tanto a Roma como a Cartago. Ambas potencias tuvieron sus disputas, aunque la que tuvo mayor importancia fue la Segunda Guerra Púnica.
Cartago era una potencia que se situaba en el norte de África, después de la Primera Guerra Púnica, tuvieron que aguardarse en su tierra hasta que unos años después, tras ver que no podían conquistar el Mediterráneo debido a las fuerzas romanas, decidieron introducirse en la Península Ibérica y así tener más territorio para vivir y arrasar con las materias primas que la Península les daba.
La conquista del sur de la Península se dio gracias al general cartaginés Amilcar Barca, pero al poco tiempo murió y le sucedió su yerno Asdrúbal, pero éste usaba más la diplomacia que la espada, por lo que pactó con las tribus del sureste. Allí fue donde fundó Qart Hadasht o Cartago Nova, actual Cartagena, en el año 227 a.C. Pero en el año 221 a.C. fue asesinado y sucedido por su cuñado Aníbal Barca.
Aunque era joven, solo tenía 25 años, ya se había distinguido por su audacia y valor, intrépido frente al peligro, enérgico y rápido en la ejecución. Antes de intentar volver a enfrentarse a Roma, quiso asegurar la dominación de Cartago en la Península, por lo que se dirigió hacia el centro, alcanzando a los Carpetanos, Vetones y Ólcades, aunque lo que quería era tomar la ciudad de Sagunto, la cual era de Roma. Durante un tiempo estuvo asediándola hasta que consiguió destruirla, lo que provocó que Roma mandara una embajada para que Aníbal se disculpara y dejara de asediar sus ciudades. Aunque no hubo fortuna y se dio comienzo a la Segunda Guerra Púnica.
Los romanos decidieron contraatacar en dos frentes, África del Norte e Hispania, aunque el plan de Aníbal era otro. Éste decidió llevar la guerra antes las mismas puertas de Roma, por lo que partió hacia allá a pie, pasando los Pirineos y el sur de Francia. Durante el camino, se le unieron numerosos pueblos que también estaban en contra de Roma, incluyendo elefantes.
Tuvo grandes victorias a lo largo de su camino en dirección a Roma, como las batallas de Tesino, Trebia, Trasimeno (217 a.C.) y Canas (216 a.C.). Aunque mientras Aníbal no estaba en Hispania, los romanos, mediante Cneo Cornelio Escipión y su hermano Publio, se encargaron de dirigir las legiones romanas en la Península, aunque al poco murieron y fue mandado Publio Cornelio Escipión, llamado El Africano, hijo del anterior, el cual llegó a conquistar Cartago Nova (209 a.C.), Baecula (208 a.C.) e Ilipa (207 a.C.) y dieron el golpe definitivo a los ejércitos púnicos. Mientras tanto, pese a las victorias de Aníbal en el norte de Italia, no tuvo tanta suerte con Roma, la cual estuvo asediando durante muchos años, hasta que poco a poco iban cayendo sus guerreros y elefentes, pero esto también es debido a los años que se pasaron caminando para llegar hasta ahí. Finalmente, tuvo que huir hacia el sur, llegando a las costas mediterráneas.
Después de todas estas batallas, se pasó a combatir al norte de África, directamente en Cartago, donde en el 204 a.C., desembarcó Escipión. Aníbal quiso volver a Cartago para defenderla pero finalmente, Roma se hizo con la victoria en la Batalla de Zama, un 19 de octubre del año 202 a.C., hace exactamente hoy 2218 años. Al final, Cartago volvió a ser derrotada en otra guerra y esta vez salió más perjudicada, no solo por la pérdida del territorio conquistado, sino por las sanciones impuestas por Roma.
Hasta aquí, un resumen de la Segunda Guerra Púnica, que aunque haya sido muy por encima, espero que haya resultado útil para entender este acontecimiento. Para saber más se puede ver este documental:
O estas películas:
- Aníbal, el peor enemigo de Roma (2006)
- Escipión el Africano (1937)
- Cartago en llamas (1960)
- Trilogía sobre Aníbal (Próximamente)
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